EL VAGON AMARILLO

sábado, 28 de junio de 2014

EL ÁNFORA DEL DIABLO

 

  —Quiero que me reveles mi futuro —le dijo Blas al diablo.
  —Podrías asustarte.
  —No, quiero saber a dónde van mis días.
  —Escucha: te regalo esta ánfora que, como ves, ha sido bellamente modelada. Pero es muy frágil y, a pesar de eso, debes conservarla así como está, porque sólo vivirás mientras el ánfora se conserve intacta.
  —¡Yo sólo te he pedido que me reveles el futuro! —replicó Blas, perplejo.
  El diablo sonreía cuando dijo:
  —Está dentro del ánfora.

Ernesto Santana, de su libro “Cuando cruces los blancos archipiélagos”

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario